En otras ocasiones sucede que si un niño hace un berrinche, todas las miradas girarán hacia la madre con una mirada reprochadora. En su lugar, la madre debería ser respaldada, porque hay muchas posibilidades de que el berrinche haya tenido lugar por no haber cedido ante alguna de las exigencias de su niño. Más bien, los criticones deberían decirle: "Buen trabajo. Sé lo difícil que resulta poner límites” (...).
Cita extraída de: "Si no quieres hijos malcriados, no hagas esto"
Más bien al avergonzar a estos padres con miraditas o murmullos, se los está haciendo sentir muy mal. Si esos padres no toleran esta presión social, podrían ceder ante la exigencia del niño para que este deje de exponerlos al castigo de la sociedad con sus gritos y sus escándalos. De esa forma, nosotros, los adultos de esta comunidad habremos contribuido con la formación de un niño con problemas y, en el peor de los casos, con la formación de un mal ciudadano.
No hay comentarios:
Publicar un comentario